El planeta tierra es un lugar que cuenta con cientos de hábitats en donde viven plantas y animales. El hecho de que un animal de la misma especie pueda habitar en diferentes lugares, implica también que podemos ver un cambio a nivel morfológico, fisiológico o etológico, lo cuales vendrían siendo diferentes tipos de adaptación.
La adaptación biológica es una cualidad que adquieren los seres vivos, lo cual les permite desarrollar ciertas facultades que les ayude a resistir diferentes condiciones ambientales o preservar su supervivencia a través de la reproducción.
Cuando un ser vivo logra desarrollar dicha habilidad, esta es transmitida a la siguiente generación, por lo que se asegura la supervivencia de una especie.
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¿Cómo fue descubierta la adaptación biológica de los animales?
Las primeras veces en donde se observó la adaptación biológica, fue dentro de las Islas Galápagos. Charles Darwin, un naturalista inglés, puedo notar que el pinzón que habitaba en dicho lugar, había logrado adaptar su pico para seguir una dieta particular.
Esta observación fue el impulso de la teoría de selección natural. En el caso del pinzón, se dedujo que una especie de esta ave logró adaptarse a un ambiente único y a lo largo de miles de millones de años. Esto ocasionó que evolucionara en trece especies distintas.
Con esta diferencia de tamaños en el pico, el pinzón logro adaptarse para consumir diferentes ciertos tipos de insectos, flores y semillas.
Adaptación morfológica
La naturaleza puede llegar a ser un ambiente hostil, por lo que los seres vivos han venido desarrollándose con la finalidad de facilitar su supervivencia. La adaptación morfológica se basa en aquellos cambios a nivel físico por el que pasa un animal o planta, proceso que puede llegar a demorar varias generaciones.
Estos cambios externos le permiten a un organismo desarrollar ciertas facultades como el camuflaje, siendo este de utilidad para mezclarse en la naturaleza y así no ser detectado por los depredadores. Sin embargo, algunos depredadores también han sabido aprovechar esta cualidad para asegurar la caza de sus presas.
Además del camuflaje, existen también otros cambios morfológicos, en donde se incluyen algunos como la forma, tamaño, color y comportamiento. Este último puede representarse por medio de ciertas acciones que realiza un ser vivo, como lo sería el caso del mimetismo.
En el caso de las plantas, estas también son capaces de adaptarse. Un ejemplo claro de ello, es el cactus, una planta que logró desarrollar sus hojas para convertirlas en espinas. De esta manera, se mantiene protegida de aquellos animales vegetarianos.
Adaptación fisiológica o funcional
Por medio de la adaptación fisiológica, un ser vivo logra desarrollar ciertos cambios dentro de su organismo, con la finalidad de enfrentarse a ciertos problemas del medio ambiente.
En las islas Galápagos, existe un animal que ha logrado desarrollarse de manera fisiológica: la iguana marina. Este reptil cuenta con una glándula de sal, la cual le permite expulsar el excretar el exceso de sal que traga del agua de mar. Además de ello, también lo puede hacer a través de la superficie de su cuerpo.
Además de estos cambios, otros animales como la zarigüeya, logran disminuir de manera considerable sus actividades fisiológicas. En el caso de la zarigüeya, utiliza este mecanismo para parecer muerta ante los enemigos.
Adaptación etológica
Las adaptaciones de los animales no solamente se dan a nivel orgánico y externo. El comportamiento de los mismos, también puede ir cambiando, como lo sería el caso de la adaptación etológica.
A través de este tipo de adaptación, los animales adoptan ciertas conductas que les ayudarán a subsistir, desarrollarse y hasta reproducirte. Esta última está representada por la selección, ya que las hembras buscan ciertas cualidades físicas en el macho antes del apareamiento.
Si un macho (poniendo de ejemplo a las aves) cuenta con un plumaje mayor o de colores llamativos, hará que su cortejo sea mucho más estimulante, debido a que las hembras relacionan esto como una pareja potencial.
La adaptación etológica también abarca otros comportamientos no relacionados con la reproducción, sino con la supervivencia ante diferentes tipos de ambientes. Por esta razón, las aves suelen migrar o cambiar de hábitat al llegar el invierno, ya que dichas condiciones climáticas extremas no son habitables para algunas especies.
Durante la migración, las aves también lograron desarrollar una actitud bastante particular, con la finalidad de aumentar su supervivencia. Por ejemplo, cuando vuelan lo hacen en grupo para no perderse o ser víctimas de otros depredadores.
Adaptación molecular
A pesar de que la adaptación morfológica, fisiológica y etológica, es algo en lo que concuerdan casi la mayoría de los biólogos que estudian estos fenómenos, la adaptación molecular probablemente sea la más discutida, debido a que no muchos están de acuerdo.
Sin embargo, en el transcurso de los años se fueron llevando a cabo investigaciones completas, en donde se ha hecho presenta la adaptación molecular que han tenido ciertas enzimas.