Los amortiguadores son una parte esencial de cualquier vehículo. Este dispositivo compuesto por un eje cromado y dos tubos de acero en donde uno de ellos se encuentra introducido sobre el otro. Cumple la función de amortiguar las oscilaciones dentro de un movimiento periódico, lo cual se logra gracias a la absorción de la energía cinética.
Dependiendo de las necesidades del usuario o su disposición monetaria, se pueden adquirir diferentes tipos de amortiguadores que, aunque están fabricados para cumplir la función de absorber la energía cinética, están compuestos por estructuras variadas y que pueden ser más o menos eficientes.
Contenidos
- 1 ¿Por qué es necesario tener amortiguadores en un vehículo?
- 2 Amortiguadores hidráulicos
- 3 Amortiguadores hidráulicos con válvulas
- 4 Amortiguadores de doble tubo
- 5 Amortiguadores monotubo
- 6 Amortiguadores regulables en dureza
- 7 Amortiguadores regulables en suspensión
- 8 Amortiguadores reológicos
- 9 Amortiguadores de frecuencia selectiva
¿Por qué es necesario tener amortiguadores en un vehículo?
Todo vehículo debería de contar con amortiguadores. La razón de ello, se debe a que brindan una mayor estabilidad al automóvil, lo cual hace de la conducción mucho más segura.
Cuando los amortiguadores se encuentran en mal estado o desgastados, los neumáticos del vehículo tienen a perder agarre en la carretera. Esto puede ocasionar que girar en curva se vuelva menos preciso, además de que la distancia de frenado puede llegar a aumentar más de un 20%, lo cual puede causar accidentes.
Por otro lado, otras partes del coche también se ven afectadas, por lo que el desgaste de las mismas se incrementa de manera considerable. Algunas de las partes que tienen a desgastarse más rápido cuando se tiene los amortiguadores defectuosos o desgastados, son los muelles de suspensión y neumáticos.
Estas razones son más que suficientes para considerar en comprar amortiguadores nuevos. Y si eres de los que no tiene muchos conocimientos sobre ellos, o simplemente deseas ver las alternativas que hay y cuáles de estas se adaptan más a tus necesidades o disponibilidad económica, te mostraremos los diferentes tipos de amortiguadores que puedes encontrar:
Amortiguadores hidráulicos
Los amortiguadores hidráulicos cumplen la función de convertir la energía cinética en calor. Esta tarea es posible gracias al aceite hidráulico que se coloca en el interior del amortiguador, líquido que deberá de pasar por los sistemas de válvulas que incorporen el pistón.
Una de las ventajas de este tipo de amortiguador, es que no requiere de algún tipo de mantenimiento, por lo que puede ahorrarnos varias molestias. Por otro lado, son bastante sencillos y su eficacia se eleva cuando se incrementa la presión.
Por último, suele aportar una gran comodidad. A través de las constantes pruebas que se les han realizado a los amortiguadores hidráulicos, se ha determinado que son los más seguros.
Amortiguadores hidráulicos con válvulas
Se reemplazan los pistones por válvulas, cuya función es la de hacer pasar el aceite cuando existe presión. Por esta razón, estos amortiguadores son mucho más eficientes que los anteriores debido a que brindan una mayor suavidad en la conducción.
Amortiguadores de doble tubo
Son los más comunes en la actualidad, por lo que tienden a ser comprados con mayor frecuencia. Este amortiguador se compone de una cámara menor, además de un pistón y cilindro que se encuentran ubicados dentro de la cámara mayor. Por otro lado, también cuenta con una válvula que se sitúa entre las cámaras.
El funcionamiento de los amortiguadores de doble tubo es bastante sencillo. El aceite pasa por el cilindro con la ayuda del cilindro; y a su vez lo hace a la cámara por medio de la válvula.
Dentro del mercado se pueden encontrar dos variantes de amortiguadores de doble tubo: de gas y aceite.
Amortiguadores monotubo
Está compuesto por dos cámaras. Una de ellas se centra en mantener el gas mientras que la otra cumple la misma función, pero con el aceite. Dichas cámaras pueden variar en su tamaño dependiendo de la compresión que se produzca en el gas y por la presión que se aplica en el pistón.
Amortiguadores regulables en dureza
Con el simple hecho de cambiar el tamaño del agujero por donde pasa el aceite (a través de una rosca), este amortiguador se adapta perfectamente a las necesidades del conductor, debido a que permite un uso más flexible.
Amortiguadores regulables en suspensión
Por medio de esta versión de amortiguadores el conductor puede ajustar el nivel de la carrocería del coche con respecto al suelo.
Amortiguadores reológicos
Al momento de recibir corriente magnética, las pequeñas partes metálicas que se encuentran en el amortiguador, pueden llegar a añadir una mayor dureza a la suspensión.
Amortiguadores de frecuencia selectiva
Cuenta con una válvula que se cierra al recibir presión, lo cual ocasiona que la suspensión se endurezca. Una de las posibles desventajas de este tipo de amortiguador, es que se encuentra oculto bajo la carrocería, lo cual hace que sea difícil de controlar.
Por otro lado, el conductor tampoco se percatará de que su vehículo ha perdido estabilidad con el paso del tiempo, debido a que se puede acostumbrar a la perdida de consistencia en la supresión del automóvil.