Los puentes son una serie de estructuras que se realizan gracias a la mano del hombre, y que sirven para sobrepasar cualquier obstáculo que se encuentre en un sitio específico. Además, estos permiten el paso de personas y vehículos de cualquier tamaño, siempre y cuando el puente sea apto para ello, y todo con el fin de transportar productos, servicios, mercancía específica o cualquier cosa, de un sitio a otro, en algunas ocasiones no sólo para rodear un obstáculo, sino también para acortar la distancia de un lugar a otro.
Los obstáculos para los cuales se crean los puentes, pueden ser de cualquier tipo, empezando desde los obstáculos naturales como aquellos que pueden estar hechos por la obra humana, en donde los naturales pueden ir desde lagos, montañas, el mar y valles, hasta diversos acantilados, y los que han sido hechos por la mano del hombre pueden ser canales, carreteras y vías férreas. La idea de los puentes es pasar sobre estos obstáculos sin dañar el medio ambiente ni ningún tipo de estructura, acortando caminos y llegando a un destino de la mejor forma.
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¿Existen distintos tipos de puentes?
Efectivamente, hoy en día la mano de obra ha ido llegando a un nivel de avance muy elevado, por lo que se dice que existen diferentes tipos de puentes, en donde los mismos se clasifican según diversas características, como el materiales por el cual están hechos, los obstáculos que quieren pasar, su estructura y el uso que se le puede dar.
Para ampliar un poco más la información, a continuación les hablamos sobre los tipos de puentes que existen hoy en día:
Tipos de puentes según el material de construcción
Puentes de madera
Los puentes de madera son uno de los puentes más antiguos de todos, siendo los primeros que el hombre conoció. En años anteriores, cuando la vida no estaba tan avanzada, estos puentes eran simplemente troncos que se colocaban para pasar por encima de lagos, riachuelos y acantilados. Partiendo de ahí, se buscó perfeccionar esta técnica, formando puentes de madera para establecerlos en lugares en donde sea difícil pasar, como ríos y lagos amplios.
El modo de estructurarlos es bastante variado, ya que pueden ser tablas de madera unidas por cuerdas, o amarrando las barcazas. Por lo general, son puentes que se utilizan sólo para el paso de personas, debido al material y la poca resistencia que puede ofrecer para vehículos. Sin embargo, existen algunos bastante resistentes que logran pasar vehículos de gran tamaño.
Puentes de piedra
De nuevo estamos hablando de un tipo de puente bastante antiguo, siendo de los primeros que el hombre conoció y creó sin darse cuenta. Estos son puentes que se van creando gracias a piedras acomodadas de forma correcta, para lograr atravesar barrancos de pequeño tamaño, o ríos de poco caudal. A pesar de que suena difícil de creer, hoy en día esta técnica tan simple se ha ido perfeccionando, logrando crear puentes de piedra bastante resistentes y para nada inestables, sino que por el contrario, son increíbles y llamativos. El puente Carlos de Praga es un grandioso ejemplo.
Puentes de cuerda
Los puentes de cuerda son aquellos que existieron antes de los puentes colgantes modernos que observamos por ahí, y es que estos son aquellos que se han creado de diversos materiales, como el bambú y el cuero. Consisten en diversas cuerdas que se atan hasta el otro extremo, en el piso, que por lo general y de forma ideal deben ir entrelazadas con otras para generar más estabilidad. Por otro lado, cuentan con dos cuerdas que se utilizan para guiarse en el camino, y un par de tejidos a los lados para generar más seguridad.
Puentes metálicos
Los puentes metálicos son aquellos que se caracterizan por estar hechos a base de hierro o acero y que tienen años de haberse ideado. Son sencillos de construir y aún más de establecer, ya que los materiales en base a los cuales están hechos, son fáciles de manipular. Por otro lado, son puentes mucho más resistentes que todos los anteriores y más ligeros.
Puentes de hormigón armado
Los puentes de hormigón armado son aquellos que se caracterizan por estar hechos tanto de hormigón, como de acero, por lo que se vuelven puentes sumamente resistentes y aptos para grandes extensiones. Estos son aquellos que se observan de forma muy común en cualquier lugar del mundo, sobretodo porque resisten diversas situaciones naturales como vientos muy fuertes, temblores y las diferencias que se pueden hallar en los climas. Además, soportan mucho peso, por lo que se catalogan como los mejores para soportar vehículos de forma regular.
Por otro lado, al ser aptos para construcciones largas, sirven de maravilla para unir extremos opuestos muy lejanos que estén por encima de lagos y mares.
Tipos de puentes según su estructura
Puentes de arco
Los puentes de arco cuentan con una estructura bastante parecida a un arco, por lo que cuentan con una curva bastante marcada hacia arriba. Se caracterizan por contar con pilares en los cuales se debe apoyar la curva, misma que se mantiene siempre sometida a fuerzas de presión.
Por lo general, se utilizan para salvar el espacio separado por ríos y lagos y pueden realizarse en diversos materiales, como la madera y el hierro.
Puentes de viga
Los puentes de viga son aquellos que se construyen por diversas secciones horizontales que se unen gracias a pilares que se encuentran en los extremos de las vigas. Por lo general son puentes resistentes cuyas vigas pueden estar hechas a base de materiales como el hormigón y el hierro, y que sirven tanto para el tránsito de peatones como de vehículos, incluyendo camiones y trenes dentro de este grupo.
Puentes colgantes
Los puentes colgantes son aquellos que cuentan con cables de acero que sujetan el tablero por el cual se transita, ya que el mismo no cuenta con ningún tipo de pilar o soporte, sino que se mantienen colgando en todo momento. En años anteriores, cuando aún no se utilizaban los cables de acero, se construían estos puentes para pasar por encima de ríos y lagos, pero con inestabilidad ya que se utilizaban cuerdas para sujetarlos. Hoy en día, los cables que sujetan estos puentes colgantes, tienen una alta resistencia, que permiten la unión de los tableros a postes o torres especialmente construidas.
Son puentes pensados para unir distancias muy largas que estén por encima de ríos, lagos y mares, con el fin de unir extremos y hasta islas. Sin embargo, es importante destacar que pierden su estabilidad siempre que fenómenos de la naturaleza se encuentren presentes.
Puentes de pontones
Los puentes de pontones son aquellos que se utilizan de forma exclusiva en ciertas situaciones, siendo estas la unión de las orillas de diversos ríos, lagos y costas. Son puentes que destacan gracias a que descansan sobre flotadores, y son muy utilizados con el fin de salvar cualquier tipo de obstáculo que tenga que ver con el agua.
Otros tipos de puentes
Puentes peatonales
Los puentes peatonales, así como nos lo indica su nombre, son aquellos que se han diseñado de forma exclusiva para el paso de las personas, sin incluir vehículos en este grupo. Es decir, las estructuras de estos puentes son aquellas que han sido creadas para salvar distancias en donde existen obstáculos tanto naturales como hechos por el hombre, en donde los mismos varían desde montañas y valles, hasta carreteras o calles excesivamente transitadas por vehículos, por lo que se requiere que un puente esté dispuesto por encima de esto.
Al tratarse de puentes exclusivos para peatones, el peso máximo que pueden soportar no es demasiado grande. Además, en muchos casos estos se han ido adecuando a diversas discapacidades motrices, por lo que cuentan con la posibilidad de ser utilizados por personas en sillas de ruedas o cualquier otro aparato necesario.
Su estructura puede tomar diferentes formas, siempre que se adapte al tránsito de las personas de forma óptima.
Puentes levadizos
Y por último, tenemos los puentes levadizos, los cuales son aquellos que por lo general se construyen en materiales resistentes como el hierro, el metal y el hormigón. Actualmente, son aquellos puentes que se caracterizan por contar con sistemas hidráulicos muy complejos pero magníficos que sirven para permitir el paso tanto de peatones como de vehículos, a través de afluentes de agua. Esto tiende a elevarse para permitir que las embarcaciones de gran tamaño, puedan pasar.